[…] independientemente de cómo se viaje, de los atajos que se tomen, del cumplimiento o no de las expectativas, uno siempre acaba aprendiendo algo.
Jack Kerouac – Satori en París
El último fin de semana del año y yo sometiéndome a una maratón de Xavier Dolan. Finalmente me senté frente a la computadora para escribir sobre él y su trabajo (algo que me debía), y lo que es más, me senté a mirar una de sus últimas películas, la película que es protagonista de este post, y que me parece sumamente propicia para encarar el primer post del 2014, porque el cine es una de mis grandes pasiones… y la vida también.
XAVIER DOLAN – MODE ON
Laurence Anyways es una celebración de las diferencias, un safari de 360 grados por la vida de Laurence Alia, un profesor canadiense que con casi 40 años decide comenzar a vestirse como una mujer. Dolan nos invita a espiar toda una década del camino que transita Laurence, con un impecable manejo de contrastes y un vestuario extravagante como punto de partida.
Deslizándose a través de escenas poéticas, el film desenvuelve su metamorfosis a partir de los bloques de color, con cierta devoción por el “slow motion” y las canciones de pasarela como nexo complementario. Así vamos cayendo de a poco en las redes de este director de 24 años, que con recursos inteligentes y un idioma visual hipnótico, logra entreverarnos en este mundo paralelo de fines de los años ’80/ años ’90.
Todo ello reformulando, en simultáneo, el concepto de belleza y desprendiéndolo de todo género, color, edad, liberándolo de límites. En fin, dejándolo correr (porque en su libertad está su belleza).
Luego, de retorno a su origen, apela a las sensaciones estrepitosas de la mano de Frédérique, la otra contraparte de la relación, a través de un juego de ciclotimia excelente 10 en el que la participación del entorno, la mirada del otro y la “normalidad” se muestran estoicos ante su amor hipotéticamente implacable, y la debilitan, haciéndola vulnerable al modelo de vida americano de los años ’50.
Es sólo a partir de la disolución de esta pareja que podemos interpretar el verdadero mensaje conciliador del film, porque su propósito parece ser conciliar los sentimientos y la universalidad de ser uno mismo.
Creo que, entre líneas, Dolan intenta contarnos una historia de amor, pero no la historia de amor de Laurence & Frédérique, sino la historia de amor de Laurence & Laurence, o la historia de amor que cualquiera de nosotros tiene consigo mismo.
Y esto me remite a uno de los últimos posts de Love Lessons sobre la esencia del amor y “poder ver más allá”, porque vivir es aprender a ver más allá de nosotros, de los otros, y de ver más allá EN nosotros: explorarnos, abrazarnos y elegirnos, despojándonos de prejuicios y etiquetas (propias y ajenas).
Porque en definitiva, al final del día, lo importante es tener la tranquilidad de saber quién sos:
Images: laurenceanyways.tumblr.com
