9 de mayo de 2022.

Todo tiene sentido cuando me alejo de la urgencia que hay en mí y me dejo impactar por la luz del momento.

Hilos de percepciones me guían hacia la gran conversación con el mundo. Solo entonces quedo disponible para recibir la gracia que habita a mi alrededor.

Soy llamada por el encuentro.

El amor no tiene límites cuando es el alma el que escribe la historia.

 

*

Hablarnos las manos. Así fue como todo comenzó.

“El amor es un pájaro”, apunto en el diario.

Lo que escribo no es la luz, sino el cuerpo que adquiere forma y contorno tras el roce con la palabra: aquella vez que miramos el mar como una despedida o cuando miramos el vació desde 3000 metros de altura.

Cuando la memoria viviente de nosotros me alcanza, lejos de atarme al pasado, me impulsa hacia la profundidad del ahora que hay en mí.

El amor es un pájaro cuando el alma pulsa. Entonces no hay vértigo. Solo un volar volando. Libertad de ser y estar. Libertad de amar la distancia porque es ahí donde puedo (re)conocerme yendo hacia el misterio.

 

15 de mayo de 2022. Eclipse de luna llena en Escorpio.

Amar la hoja que cae y la flor que brota
Amar tus discos, los míos,
las palabras que dejaste en el mantel
Amar las avenidas y el mar,
el desconocimiento y el anhelo de certezas
Amar la nada (que es todo)
Amar la muerte que lleva a la paz
Amar el día que nos quedamos a oscuras, la sudestada, el gato negro serpenteando entre nosotros
Amar mi boca sobre los bordes de la taza, el olor a pan casero, la supervivencia de las plantas
Amar mi cuerpo al sol, ese asunto de la ventana, la iridiscencia de la entrega
Amar la noche, aquel invierno en la playa
las cosas que dejé atrás, las que aún quedan por amar
Amar la apertura del cielo y su grisura,
la lluvia que vas a imaginar cuando me leas
Amar la partitura del día
Amar lo azul sobre mí

 

16 de mayo de 2022.

Apunto fragmentos valiosos de “El poder del ahora”:

«Su situación vital existe en el tiempo.

      Su vida es ahora.

     Su situación vital es material de la mente.

     Su vida es real.

Encuentre la “puerta estrecha que conduce a la vida”. Se llama el Ahora. Reduzca su vida a este momento. (…)

Cuando usted está lleno de problemas, no hay espacio para que entre algo nuevo, no hay espacio para las soluciones. Así que siempre que pueda, abra algo de espacio, para que pueda descubrir la vida que hay oculta en su situación vital.

Use sus sentidos plenamente. Esté donde está. Mire a su alrededor. Mire solamente, no interprete. Vea la luz, las formas, los colores, las texturas. Sea consciente del espacio que permite que todo sea. Escuche los sonidos; no los juzge. Escuche el silencio que hay bajo los sonidos.»

___

«¿Oye aquel perro que ladra a la distancia? ¿O ese gato que pasa? Escuche cuidadosamente. ¿Puede sentir la presencia de lo No Manifestado en eso? ¿No puede? Búsquelo en el silencio del que surgen los sonidos y al que los sonidos retornan. (…)
Todo sonido nace del silencio, muere en el silencio y durante su tiempo de vida está rodeado de silencio. El silencio permite al sonido ser. (…)

La esencia de todas las cosas es el vacío.

Lo No Manifestado no sólo está presente en este mundo como silencio; también impregna todo el universo físico como espacio, interior y exteriomente. Todo el mundo presta atención a las cosas que hay en el espacio, ¿pero quién presta atención al espacio en sí mismo? (…)

Puesto que el espacio es “nada” podemos decir que lo que no está es más importante que lo que está. Así pues, hágase consciente del espacio que lo rodea. No piense en él. Siéntalo. Preste atención a la “nada”.»

*

Quiero entrar en el mundo oculto que hay en mí. Ver más allá de mi situación vital y entrar en la vida, en el silencio, en el espacio breve entre las cosas.

Entrar es volar. Quiero volar volando.

 

sol

A los 10 años encontró refugio de la ciudad de la furia en una máquina de escribir. Más tarde conectaría con la escritura de viajes en un intento de traducir la mirada poética sobre el mundo que la rodea. Desde entonces, se ha alejado y ha vuelto a la poesía como quien vuelve a los brazos del amante: buscando calor.

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