“Shall I compare thee to a summer’s day? 
Thou art more lovely and more temperate: 
Rough winds do shake the darling buds of May, 
And summer’s lease hath all too short a date: 
Sometimes too hot the eye of heaven shines, 
And too often is his gold complexion dimm’d: 
And every fair from fair sometimes declines, 
By chance or natures changing course untrimm’d; 
By thy eternal summer shall not fade, 
Nor lose possession of that fair thou owest; 
Nor shall Death brag thou wander’st in his shade, 
When in eternal lines to time thou growest: 
So long as men can breathe or eyes can see, 
So long lives this and this gives life to thee.”

― William Shakespeare, Shakespeare’s Sonnets
¿Por qué igualarte a un día de verano
si eres más hermoso y apacible?
El viento azota los capullos mayos
y el término estival no tarda en irse;
si a veces arde el óculo solar,
más veces su dorada faz se nubla
y es norma que, por obra natural
o del azar, lo bello al fin sucumba.
Mas no se nublará tu estío eterno
ni perderá la gracia que posee,
ni te tendrá la muerte por trofeo
si eternas son las líneas donde creces:
Habiendo quien respire y pueda ver,
todo esto sigue vivo y tú también.

William Shakespeare, Sonetos.

Images: tumblr.com
sol

A los 10 años encontró refugio de la ciudad de la furia en una máquina de escribir. Más tarde conectaría con la escritura de viajes en un intento de traducir la mirada poética sobre el mundo que la rodea. Desde entonces, se ha alejado y ha vuelto a la poesía como quien vuelve a los brazos del amante: buscando calor.

2 Comments

Leave a Reply

Your email address will not be published.