“Si existiera algún dios, no estaría en ninguno de nosotros, ni en ti ni en mí, sino en este pequeño espacio intermedio… en el intento de comprender a alguien o compartir algo. Lo sé, es casi imposible lograrlo, pero, ¿a quién le importa en realidad? La respuesta debe estar en el intento.”
Céline – Before Sunrise
… Compartir, esa palabra. Así es como aterricé en el grupo de Dinámicas Creativas. Y aterrizar, esa palabra…
Son las 2 am y juego a intercambiarle los verbos a Cortázar. Son las 2 am y me detengo a analizar la procedencia de mi vuelo. Me detengo a analizarlo sólo porque son las 2 am y tengo ganas de cansarme el cansancio un poco más de la cuenta (aunque si apelara a lo honesto, debería admitir que este post se asentó en mi cabeza hace ya algunos días).
Entonces, leamos coincidencias hasta que caigan pestañas en mi manto de almohada. Entonces, dejemos diluvios de hilos del mundo sentados en acta:
En el 2012 fue mi primer viaje a Europa, un viaje que terminó de calarme los huesos sólo unos meses después. Meses suficientes para encontrarme con el blog de Aniko Villalba por recomendación de un amigo. Meses suficientes para comprar el libro y comenzar otro viaje, el de lecturas digitales a las 7 pm. Meses cercanos a un marzo extranjero; y un 15 de enero, mi primer Veo Veo con el tema una canción bajo el (a)brazo. Es que déjenme aclararles, soy melómana-palabraorgásmico dependiente, y la alianza entre música & letras es canción predilecta en mi piel de secante.
Pensar que quizás si no hubiera leído ese libro no hubiese ahondado en los viajes; y quizás, tampoco caminomundos. Quizás los no-desafíos hubieran pactado el silencio de los Hey Hey World y Titín por el Mundo; de Wisława Szymborska y laotraciudad Maricel. O tal vez, el silencio Natalia, o Escribidores Poesía; silencio Eva & Martín; y aún más, la Hija del Cambio.
Quizás los no-caminos, los no-mundos, los no-nortes de papel con las no-ideas aleteando en mi cabeza. Quizás lo no-viajes dinámicos ni las ciudades fetales. Quizás lo no-argumentos, las no Rayuelas de andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos.
Pero prefiero decirle que no a los no de este no-mundo. Prefiero los sí. Prefiero escribir intensiva, derrapando hacia quién sabe dónde. Prefiero llevar el tatuaje de cartas-ajenas para drenarme las rimas; prefiero la violencia de versos sinceros; prefiero ver que mirar.
Porque mejor anfibia, artesana, cariosa, sísmica. Mejor Soladjetivo, mejor dulce de fresas con menta…
Son las 3 am y me detengo a analizar el inventario de mi viaje: el saldo da a mi favor. [Me voy a dormir tranquila]
“Porque vaya a donde vaya
And regardless of the java
Someone always brings some ganja
And it doesn´t matter cuanta.”
Es un juego que jugamos muchas veces cuando éramos chiquitos. Y ahora queremos seguir jugándolo. Es una excusa para conocer lugares de la mano de otros viajeros, contarnos historias, viajar aunque no tengamos la oportunidad de hacerlo, conocer otros viajeros que andan dando vueltas por el mundo.
Sweet world: 1 perro, 1 mujer y 1 hombre juntos en un viaje interior-exterior. 16 días para juntar 2000 euros, comprar un auto y largarse a los caminos. La mujer comienza a descubrirse. El hombre la acompaña desde cerca. El perro adora el viento cálido de las ventanillas.
16 postales x 16 posts.
Aiiiiiiii me encanto!!
Una vez planeé un viaje que estuvo a punto de ser, de hecho comenzó a ser, pero no fue. Entonces fue un si-viaje-no. Yo también prefiero los si, sobre todo los si-viajes. =)
Qué lindo Facu… Brindemos entonces por los si-viajes 🙂
¡Ohhhh ahhhh iiiii!
Simplemente precioso…